Apoyado un cutter envenenado, que lo utiliza en el 78 % de sus lanzamientos a una velocidad media de 99.5 millas por hora, Emmanuel Clase tritura marcas de salvados en la franquicia de Cleveland y se enrumba a convertirse en el primer cerrador que lidera toda la MLB en rescates en tres campañas en fila. Con solo 26 años y más de 150 salvamentos, nadie se atreve a ponerle techo.
Pero Clase puede estar bajo control salarial hasta 2028 y, en el mejor de los casos, en las próximas cuatro campañas devengaría US$31,3 millones en salarios, dado que se «aseguró» con una extensión recién ganarse una plaza en el Big Show.
Ahora, el nacido en Río San Juan ha decidido vender el 3 % de los salarios que devengará en las Grandes Ligas a partir de 2025, a una empresa que lo ha colocado en una plataforma donde cualquier persona adulta puede comprar acciones.
Finlete, un start-up californiano, ha acordado con Clase, apostando a que el dominicano podría superar los US$150 millones en ganancias en toda su carrera.
Clase llegó a la MLB en 2019 con los Rangers y desde 2021 lanza con los Guardianes. En abril de 2022 firmó una extensión que le garantiza US$20 millones hasta 2026, con opciones para 2027 y 2028 de US$10 MM, cada una.
Al vender ese 3 %, el lanzador obtuvo unos recursos (no revelados) por un dinero que nadie asegura que lo cobrará.
¿Cómo funciona?
Filete colocó en su plataforma en la Web (clase.finlete.com) unas 300,000 acciones a un precio de US$12 por cada una, con un mínimo de 33 compras (US$396). Tiene fijado levantar un máximo de US$3,6 millones, en esta ronda.
En función del tamaño de la apuesta así sería el retorno. Los inversores comenzarán a recibir pagos desde 2025, con dos desembolsos al año, y podría llegar hasta 2049.
Rob Connolly, creador de Finlete bajo la sombrilla de Comcast/NBC Universal, explicó a Diario Libre que Clase proyecta salarios sobre los US$25 millones a partir de 2029 cuando llegue a la agencia libre.
Clase tiene asegurado pagos por US$4,9 millones en 2025 y US$6,4 MM en 2026, muy por debajo de lo que devenga un cerrador élite de la actualidad como Josh Hader (Orioles), quien cobra US$19 millones.
El retorno
A modo de ejemplo, una persona que invierta US$50 mil (5,208 acciones) ese dinero puede llegar hasta US$94,119 para 2035 si se cumplen las proyecciones de la plataforma.
Del salario que Clase recibirá en 2025 se girará a la cuenta del inversionista US$2,476 y en 2026 subirá a US$3,233. En caso que los Guardianes ejerzan las opciones de 2027 y 2028 los giros hacia el inversor serán de US$5,052, cada año.
El esquema genera atractivo si el quisqueyano llega al mercado de agente libre y firma en función de lo que hace en la actualidad.
Finlete proyecta que Clase pudiera devengar US$25 millones al año entre 2029 y 2033. La hoja de cálculo augura salarios de US$15 millones para 20234 y 2035, con retornos para el inversor US$7,578 en cada curso.
De materializarse ese pronóstico entonces ese inversionista de los US$50 mil recibirá pagos de US$12,630 al año durante ese lustro más otros dos de US$15,156 por lo que recuperaría su siembra y ganaría US$44,119 con la transacción, a precios de 2024.
«No se trata de una inversión que le permita obtener un rendimiento enorme en un año», explica Connolly. «La oportunidad se basa en sus ganancias de carrera. Y por la forma en que está lanzando, su próximo contrato podría ser el más grande para un lanzador de relevo en la historia».
En el caso de Finlete, las ganancias futuras recibidas de los atletas incluyen salarios, bonificaciones por desempeño y otras ganancias directamente relacionadas con los ingresos recibidos del equipo o la liga en la que juegan.
Se excluye expresamente cualquier ingreso que el deportista pueda obtener por patrocinios, promociones, inversiones o cualquier actividad fuera del campo de juego.
DIARIO LIBRE
